
Los previsores del porvenir: antes de la Guerra Civil

Curso del año 1934

Zarza Capilla la vieja tras los bombardeos

Los previsores del porvenir: antes de la Guerra Civil
Guerra Civil, Extremadura y Zarza Capilla
M
ucho se ha hablado y escrito sobre la Guerra Civil española y, aun
con ello, gran parte de sus historias continúan siendo prácticamente desconocidas para la mayoría de la población. Bombardeos como los de Guernica pasaron a la historia por su
indudable gravedad y repercusiones, pero otros como los de Zarza Capilla solo los recuerdan ya sus vecinos. Es por ello que, para descubrir y comprender sus peculiaridades, rivalidades y fortalezas, hay que adentrarse en el contexto de un conflicto bélico que no hizo sino fragmentar a un país cuyas voces más críticas, durante 4 décadas de dictadura, se sumieron en un obligado silencio.
Aunque, tal y como se configuró la línea del frente extremeño, la cuña que se formó en las tierras pacenses que seguían bajo mando republicano facilitó que en la provincia de Ciudad Real se mantuviese el poder gubernamental. Fue, principalmente, a partir de la batalla de Medellín, cuando se fue definiendo la extensa zona del centro y noreste de Badajoz que conformaría la resistencia republicana en Extremadura. Estaba comprendida por las Vegas Altas, Medellín, La Siberia y La Serena.
En cuanto a Zarza Capilla, prácticamente limítrofe con la provincia de Ciudad Real por la comarca de La Serena, podría decirse que nunca dejó de ser republicana en el
"Hacen el binomio de República-Guerra Civil; de manera impepinable, llegaba a la Guerra Civil. Eso es mentira. O sea, científicamente y desde los presupuestos históricos, no existe ese determinismo histórico..." (Antonio Doroteo, 00:50)
transcurso de la guerra. De hecho, a excepción de unas pocas jornadas en el mes de agosto de 1938, así fue. Se trató de uno de los escasos municipios que, de la hoy llamada ‘Comunidad Autónoma de Extremadura’, resistió el avance de las tropas franquistas hasta los últimos días de la contienda, con la línea del Frente situada, durante el último año, a unos 4 kilómetros de distancia de sus tierras.
Con respecto a las condiciones de vida, los vecinos del municipio que vivieron la guerra siendo niños, las recuerdan como muy duras. Coinciden en que se aprovechaba absolutamente todo. Hablan de los cardillos, las achicorias, los jaramagos y el chorizo de las ovejas, que murieron en un año en que “no sé qué le entró a las ovejas”, según Crescenciano Mayoral Rubio. Estos productos constituyeron la base de su alimentación durante los años del conflicto.
"Sí, aquí hubo gente que lo pasó mal, sí. Había poco que comer". (Gervasio Sánchez Gil)